El pasado verano irrumpió en nuestro país y en otras ciudades del mundo el boom de Pokemon Go, superando todas las expectativas disparando la cotización en Bolsa de Nintendo, llegándose a revalorizar en un 93% y llenando las calles de entrenadores de estas criaturas, gracias a la integración de la realidad aumentada y el geomarketing, pero parece que el chollo de la compañía japonesa está llegando a su fin.
En el último estudio publicado por la Universidad de Boston se hizo una muestra de más de 1.100 jóvenes americanos de entre 18 y 35 años que habían utilizado ya Pokemon Go en un iPhone 6 y desveló que la gran mayoría de jugadores de este videojuego lo siguieron las dos primeras semanas, perdiéndose el interés a medida que avanzaba el tiempo, casi despareciendo transcurridas unas seis semanas.
Pues bien, por lo que hemos podido saber desde Lina Ortas es que es ahora Google la que ha lanzado su propia versión de Pokemon Go llamada Tango que se trata de una aplicación que en vez de cazar a criaturas animadas japonesas, ahora permite “atrapar” conocimientos de los museos, siendo el museo de Detroit Institute of Arts el primero de utilizar este tipo de tecnología, haciendo posible que los visitantes, a través de sus smartphones, cuenten con una información adicional de las más de 65.000 obras expuestas, lo que parece una amenaza real para terminar con las audio guías o incluso las visitas guiadas.