Los empleados de una marca pueden convertirse en los mejores embajadores de la misma. A día de hoy, en la mayoría de los casos las marcas recurren a personajes populares que se convierten en sus embajadores, pero ¿quién mejor para recomendar una marca que una persona que la conoce desde dentro? El empleado es el principal activo de una marca y esa filosofía la recoge el Employee advocacy o los embajadores de marca
Hay que tener en cuenta que son los empleados los que conocen perfectamente cuáles son los atributos que caracterizan al producto o servicio y que sabrán defender tanto sus puntos fuertes como sus puntos débiles. En el proceso es fundamental saber qué herramientas se pueden utilizar, cuáles son los mejores medios para propagar las bondades de una marca, etc. Es por ello que los empleados pueden llegar a ser el mayor activo en una estrategia de marketing, branding y comunicación.
Según un estudio de We are Social Media solo el 15% de las personas confía en las recomendaciones de la marca, mientras el 85% lo hacen en personas que ellos mismos conocen; el 70% de la percepción que el consumidor tiene de una determinada marca están determinadas por las experiencias que otros han vivido.
De esta manera, los empleados pueden ejercer un rol de influencer en función de su actitud y nivel de servicio, haciendo que puedan fidelizar un cliente o provocar en cambio, que la compañía pierda al mismo. Es por ello que para llegar al éxito y alcanzar el corazoncito del consumidor es clave construir una comunidad de trabajadores que realmente estén orgullosos de pertenecer a su organización y estén dispuestos a transmitir los valores de la empresa.